Durante toda su vida, los protagonistas de este video no dejan de escuchar la misma frase: “¡Los niños no lloran!”, “Pareces una niña”. Con el tiempo, los niños fueron creciendo y dejaron de llorar. Si les transmitimos el mensaje de que deben respetar a las niñas desde bien pequeños, quizá las cosas serían distintas…
No te puedes perder este vídeo, el mensaje final es estremecedor.
VEA EL VÍDEO A CONTINUACIÓN:
ORIGINAL