Mientras pasaba el tiempo, los vecinos comenzaron a notar unas cosas extrañas cerca de la puerta del vecindario. Había un perro, solo, abandonado y desesperado.
Los vecinos estaban desconcertados y frustrados, no sabían que hacer. Llamaron a la policía, pero no les dieron respuesta, y el perro seguía ahí en mal estado. Finalmente los vecinos no pudieron más y fueron ellos con sus propias manos a rescatar a aquel pobre animal. Se saltaron el muro y encontraron a este perro sin nombre y maltratado.
Desde ese día su vida cambió y ahora ha mejorado enormemente. Veamos como sucedió todo.
No sólo por el hecho de ser perros les da el derecho a sus dueños de maltratarlos.
Estaba encadenado y completamente solo. Echado en el concreto. Estaba ladrando, desconfiado y clamando por su vida.
De alguna forma los vecinos le ayudaron y actuaron de inmediato, pero el problema era que el perro cada vez se desesperaba más.
Finalmente un día pudo ser rescatado con mucho esfuerzo.
Y pudo tener su propio nombre, Alfie.
Pero él se encontró a él mismo y a una nueva familia muy amorosa. Y además, un nuevo padre.
El concreto fue sustituido por un mejor lugar.
Nada de cadenas, nada de bozal.
¡Ahora tiene juguetes por todos lados! ¡Muchos, muchísimos juguetes!
Incluso tiene un hermano igual a él.
Picnic con toda la tropa reunida.
Aventuras emocionante y muchos juegos…
Sin faltar el amor y libertad. Así es como Alfie vivió sus últimos años. ¡Ahora es muy feliz!
Fuente: Petflow
No te olvides de compartir este artículo con tus amigos de Facebook.